Encrucijada de palabras

"Soy un individuo de una especie animal elevado por mis semejantes a la dignidad de ser humano". No sé de quien es la frase pero sí que es realista, por eso espero que a través de este espacio logre alcanzar algo de ese ser humano del que habla. Dicen que este nuevo medio de comunicación es aislacionista, que no fomenta el calor que te brinda una amistad, pero cuando quieres hablarle al mundo y no importa quién pueda escuchar, no importa que forma utilices, lo importante es conseguirlo.

12 julio, 2007

Conociendo Venezuela (II)

El amor por su país también me llama la atención, sobre todo el patriotismo y el amor a los símbolos patrios. En España, debido al franquismo el patriotismo y los símbolos suenan a fachismo, algo que aún no ha sido superado. También por una cuestión muy importante y digna de tener en cuenta, y es que gran cantidad de españoles creemos que deberíamos vivir bajo una República democrática y olvidarnos ya de una casa real que lo único que hace es gastar el erario público sin retribuir a cambio al país. Aprovecho esta tribuna para denunciar que los españoles y extranjeros nacionalizados o residentes en España tengan que pagar para poder entrar a visitar el Palacio Real, un bien público del Estado español que mantenemos a través de nuestros impuestos todos los que trabajamos en España.

Otra de las cosas que me llama la atención de Venezuela es que el turismo dentro de su propio país sea tan caro y clasista. Cuando, después de dos años, conseguí ir a Salto Ángel con Víctor, fue sorprendente que el único venezolano de toda la expedición fuese Víctor. Había 5 españoles, incluyéndome, 2 argentinas, un americano, un japonés y un venezolano. ¿Por qué? Porque los paquetes turísticos para ir hasta allá son carísimos, de hecho para mí fue un esfuerzo ahorrar el dinero. Al lugar se tiene que llegar en avioneta y para ir al Salto Ángel, como ya relate aquí, tienes que navegar 4 horas en curiara, dicen que lo difícil de llevar el combustible hasta allá es lo que encarece el viaje, algo que no tiene sentido teniendo en cuenta que Venezuela es un país donde la gasolina es más barata que el agua. Lo que pasa también es que el turismo está pensado para extranjeros con dólares o euros y, en todo caso, para criollos pudientes, por lo que aunque se trata de un turismo de aventura las mayores ofertas son las de sitios que ofrecen ciertos lujos. Imagínense que por el dinero que cuesta el viaje a Canaima, donde está el Salto Ángel, eso sí, yendo desde Caracas en autobús y hospedándose en el lugar más barato, te puedes ir de España a Turquía dos semanas con todos los gastos pagos.

Otro destino, al que yo aún no he podido ir, es el Archipiélago de los Roques, donde un full day te puede costar más de 400.000 bolívares, unos 150 euros. En España por ese dinero te vas una semana a Tenerife. Que decir de la Gran Sabana donde se necesita tiempo, el viaje desde Caracas es de más de 12 horas, y obligatoriamente tienes que ir en 4x4; la gasolina, al ser un lugar apartado de la civilización cuesta a precio de oro y casi indispensablemente tienes que tener tienda de campaña, saco de dormir, hornillo, cocina eléctrica, en fin… una serie de lujos que no todo el mundo tiene y menos acá en Venezuela.


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