Felicidades Paco
Ayer fue el cumpleaños de mi panita Paco. Bueno, en realidad se llama Ricardo y aunque la mayoría de la gente ya le llama así yo me resisto, a mi me le presentaron como Paco y Paco se queda, además a él no le importa. Eso sí, llamarle Ricar es sólo un privilegio de la Cuevas. La verdad es que le mande un mensajito de texto porque curre hasta tarde y no pude llamarle desde un locutorio, pero como tengo mis dudas de que le haya llegado mi felicitación, dejaré testimonio escrito en esta bitácora.
Paco llegó a nuestras vidas hace relativamente pocos años, ¿unos 5?, no sé, el tiempo ya empieza a pasar peligrosamente deprisa para nosotros. Pero como os decía, Paco es un amigo reciente, pero hemos pasado demasiadas cosas juntos (incluso tenía una habitación propia en el apartamento que se compró con Laura, claro, hasta que llegó Víctor, su hijo, y me destronó, cosas de la vida). Peor estos dos personajes, Laura y Paco, se calaron muchas laurrakadas: llamar a su puerta a las 3 de la mañana de un día entre semana para quedarme allí a dormir (la Cuevas casi me mata, jajajaja). Pero también la pasamos chévere, largas noches de vino y conversaciones sobre la vida, el pasado, el presente y el futuro; el memorable Cola-Cao de Laura en mitad de un quinito; las salidas a Santander; en los primeros tiempos las partidas a los dardos y los kinitos en Solares; en fin, tantas cosas que más que una pareja (Laura y Cuevas), éramos un trío (pero en el buen sentido de la palabra listillos).
En fin Paquito, que gracias por estar ahí, por ser amigo desde el principio y muchas felicidades!!!!!!!!!!!! Espero que este año te venga repleto de éxitos (para ser feliz quiero un camión, jajajajaja).